Cuando es dificil decir adios..

He estado un poco retirado de las labores del blog, pues las actividades del día a día mientras que estoy en África, no me han permitido escribirles, pues mientras que estoy de descanso, trato en lo posible no acercarme a un computador con Internet por que podrían necesitar de mi ayuda en el trabajo.

Pero no solo eso me ha separado de mis asiduos lectores, desde el mes de abril del presente año, mi padre sufrió un accidente cerebro vascular isquemico (coagulo de sangre o de colesterol que bloquea alguna parte de las arterias cerebrales), que lo dejó limitado del hemisferio derecho, quedando afásico (sin habla). Los que conocieron a mi padre, saben que siempre ha sido un hombre terco y le gusta luchar en contra de todo, así pues como le habían dicho que era muy poco probable que se recuperara del ACV, él comenzó a realizar los ejercicios y todas las cosas necesarias para salir de dicho cuadro.

Nosotros procuramos, hacer todo lo posible para que su recuperación fuera lo mas rápido posible, pero el siempre teniendo recelo de la prognosis. Así pues, mi padre comenzó a hacer cosas que no debería estar haciendo con la severidad del ACV y los médicos le dieron el alta para poder continuar su recuperación lenta en su casa. Por lo tanto me fui tranquilo de vuelta a mi trabajo en África viendo su lenta, pero segura, recuperación. Pero Dios, le tenía otro plan, en menos de una semana (mayo), mi padre se volvió a complicar por consecuencia del ACV, lo volvieron a hospitalizar en la unidad de cuidados intensivos, comenzó a deteriorarse, pero su espíritu luchador seguía en pie de guerra.

Afortunadamente, mi rotación fue corta ya que situaciones que escapan de mi voluntad retrazaron mi viaje a África, por lo cual se decidió que fueran 3 semanas para no afectar a mi reemplazo (back). Así pues el día 23 de Mayo viaje de vuelta a casa (coincidí con William S. en el avión) y el día 25 en la noche viajé a la ciudad de Maracaibo para estar con mi padre. Tuve la suerte de estar con él todo ese tiempo acompañándolo en ese sufrimiento de estar incomunicado, que su cárcel era su propio cuerpo. Durante ese tiempo de convalecencia, Dios le permitió a mi padre saldar cuentas con todas las personas que creía haberle hecho daño y sobre todo hizo las paces con Dios. El día jueves 29 de mayo, poco a poco su cuerpo comenzó a deteriorarse, pero él seguía muy conciente, el día viernes 30 de mayo, media hora antes de encontrarse con Dios, mi madre le hablo a mi padre, no se lo que le dijo, pero fue lo suficiente y necesario, para él poderse ir ligero de equipaje a rendirle cuentas a Dios.

No creo que mi padre le debiera mucho a Dios, pues por su condición de medico, siempre trato de ayudar al necesitado en su oficio, sabia que había ayudado a mucha gente, pero jamás me enteré de la cantidad hasta el día de su funeral.

Se que muchos de mis lectores, trataron de comunicarse conmigo vía telefónica, pero para ser honesto, no tenia ganas de nada y menos de conversar sobre el tema, así pues les agradezco sus palabras de condolencia que me hicieron llegar a través de mi esposa o vía email. El nombre de mi padre Dr. Enrique S. L., pero para sus amigos y familiares Henry.

En lo personal, prefiero recordar a mi padre mi amigo de la infancia que me llevaba a pescar muy temprano en la mañana, no sin antes comprar nuestro respectivo desayuno (pastelitos) cerca del manicomio o con el cual iba a comer comida china, el que se disfrazo de superman cuando éramos pequeños y vivimos esa fantasía de que nuestro padre era superman, el que me llevaba en hombros cuando no quería caminar mas y el eterno novio de mi madre. El tío complaciente que se levantaba a las 5 a.m. para prepararles panquecas a mis primos Humberto Enrique y Pedro Jose después de una noche de parranda.

Este el padre que recuerdo, el de mi infancia y el cual siempre me acompañará en mis pensamientos y corazón,

Fava Okiri...

El día de ayer sábado 25 de julio, el Cabezón (Engineer HEAD), programó una actividad de grupo para salir un poco de la rutina, dicha actividad consistía en un juego amistoso de Polo Acuático, bebidas refrescantes y energizantes, para luego terminar con una agradable cena al estilo español...

Para se honesto, la cosa sonaba muy animada, dude al cambiarme, estuve a punto de ponerme mi bañador (traje de baño), pero como buen maracucho desconfiado, tuve mi recelo en participar en el juego y preferí ver los toros de la barrera.

Todo comenzó muy bien, tratando de formar los equipos, sin preferencias ni nada de eso, se inventaron unas reglas para evitar tanta complicación y peleas, las porterías se pusieron a mitad de la piscina y el juego arrancó. Suena muy animado y bello, verdad?, pues no están extremadamente equivocados, siempre tendemos a olvidar los detalles para intentar ver las cosas como deseamos. En una piscina de 50 metros, utilizaron la mitad de la misma para 22 jugadores, 21 hombres y una mujer, el referee una argelina que no tiene ni la mas p… idea de cómo se juega, nota aclaratoria, no es por bruta, pues no tiene ni un pelo de bruta, si no que jamás a jugado ningún tipo de juego acuático pues vive en medio del desierto!!.

Así pues, luego de unos minutos haciendo gala de pases y nado libre, comenzaron los forcejeos, hundidas y arañazos, lo mas cómico del asunto, no es el arañazo en sí, sino quien lo propinó, me imagino que pensaron que la dama que jugaba, verdad? Jaja, no nuestro querido amigo Paul, tratando de atrapar a Orlando en su huida con la pelota. Pero el pobre Orlando tendrá mucho que explicar en casa, pues aun con pruebas fotográficas le van a creer que fue un hombre que lo hizo en un juego amistoso.

Los Equipos

El Cabezon

El Juego

El público

El herido

Luego de una actividad tan fatigante, llego la hora de comer, nuestro amigo Arturo de IT ha preparado unas tortillas de patatas muy buenas, habilitaron un área especial para nuestra reunión y finalizamos con un cava español.

Hoy domingo 29, tendremos nuestra reunión frente a la TV para ver el partido final de la Eurocopa, donde se enfrentan España y Alemania, yo no soy muy amante del fútbol, pero jamás me pierdo una reunión de ese tipo pues compartiremos delicias de la madre patria en compañía de buenos amigos.

Hasta la próxima, Il Chala! (Con el favor de Dios)